LA CONSCIENCIA ¿Cual?
La consciencia del Yo, aquí y
ahora. Ésta emerge desde nuestro cerebro hacia el exterior percatándonos de que
existimos, esta transición o salto cuántico se genera porque existe una
conexión electromagnética entre mi cerebro y un cerebro universal o mejor
digámonos Dios, esta parte invisible de la cual todos damos fe que existe, pero
no interpretamos; de que se trata, es la disyuntiva que debemos resolver de
mejor manera para cambiar el mundo.
La lectura que tenemos, del hecho
de existir depende exclusivamente de lo que nosotros enseñamos como padres a
nuestros hijos y la sociedad que nos alberga.
Aquí surgen todas las religiones,
sectas, logias, filosofías, ideologías, de todas las naturalezas y
conveniencias políticas sociales económicas y cada quien se alinea a donde
desea hacerlo por mil razones. O sencillamente le toca.
Estamos en la actualidad
manipulando ondas electromagnéticas, nanotecnología, microbiología a niveles
científicos, reproduciendo la partícula de Dios etc. Y se sigue impartiendo
conocimientos en escuelas colegios universidades ancladas en el pasado
surgen miles de enunciados en
Facebook, redes sociales y demás con lecturas cortas que presumimos a todos que
somos conscientes he inteligentes y hasta allí llegamos porque el resto es mi
ego lo importante. Lo demás no importa.
¿Se dan cuenta, lo que significa
tener una conexión directa con lo que origino todo en el universo?
Lo menos que deberíamos estar
pensando, las implicaciones que conlleva este hecho, luego de millones y millones
de años de evolución. Más aun, cuando
nuestras vidas son absolutamente cortas, comparadas con el tiempo que
representa la línea de la evolución.
Imaginemos por un instante que
fuimos conquistados por los españoles instaurándonos todas sus costumbres,
idioma, religión, etc. Solo podríamos ver en petroglifos simbología en piedra
de los aborígenes lecturas similares al árbol de la vida que se estudia en
física cuántica actual. De igual manera en grabados Mayas, Incas Quechuas
similares simbologías en pueblos asiáticos, europeos, por todo el mundo existía
una conciencia universal que fue transgredida por estas culturas que se creían
superiores, hasta la presente seguimos con un absurdo en cuanto a la concepción
de la vida.
¿Es claro que somos esclavos modernos
de nuestras creencias y costumbres de quién?
Nuestro primer reto es sacar de
esa esclavitud a nuestros hijos.
Te gustaría que nuestros hijos
hicieran realidad sus sueños ¿Cuáles sueños? Los que genera en su infancia
cuando aún su corazón es puro, limpio de toda contaminación que nosotros
poseemos como gran cosa: “no te dejes de nadie”, “tienes que ser el mejor
estudiante y demostrarles a todos que eres inteligente”… “mira como es tu
hermano”, “tienes que superarlo”. “No te andarás llevando con esos longos”,
“tienes que escoger tus amistades”, “tu perteneces a una familia x que tiene
valores: éticos, morales, religiosos y respeta a todos….”
Es inverosímil como al niño o
niña le confundimos totalmente y allí apenas comienza toda la realidad que
hemos creado. una sociedad que está
involucrada en todos los males habidos y por haber: drogas, vicios, suicidios, robos, asesinatos,
pornografía infantil, femicidios, etc. Etc.
En los primeros años escolares
empezamos a contarles cuentos de fantasía que ellos lo toman como reales,
estos, con personajes buenos y malos, héroes y villanos, poderosos y
sobrenaturales. Basados en los instintos de los animales el más fuerte vive.
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